El Precio del “Desarrollo”… ¿Equivale un costo Ambiental?

Por Ulises Iraheta 



Desde el pasado tres de Marzo Grupo Roble ha puesto en marcha un proyecto denominado “Brisas de Santo Tomas” en los cantones Las Casitas y El Porvenir, del municipio de Santo Tomas. Dicho Proyecto, según la empresa,  traerá desarrollo y obras sociales a las comunidades, sin embargo el costo ambiental es alto y es ahí donde surge la pregunta… ¿El desarrollo equivale un costo ambiental?

                                          Foto: Ulises Iraheta
                               Grupo Roble anuncia cada una de sus compensaciones a los habitantes






El Proyecto Urbanístico de Santo Tomas consiste en la construcción de 416 viviendas  y para ello Grupo Roble ha empezado, el reciente tres de marzo, la terracería de 40 manzanas de hectáreas donde han sido talados más de 1,300 árboles y 24,000 arbustos; además de esto, se suma que la región posee mantos acuíferos, donde al menos tres ríos han sido contaminados y diversos pozos de agua se han secado debido a la deforestación.







Según Sonia Sánchez, Presidenta de Mujeres de Santo Tomas, en 2003 el territorio contaba con una ordenanza de uso y ocupación de suelo, otorgada por la alcaldía, donde era considerada como zona agrícola, de recarga hídrica y reserva ambiental. Sin embargo la administración de 2007 a cargo de Carlos López y donde el actual alcalde Efraín Cañas era concejal, cambia la ordenanza y tipifica la zona como zona urbanística; lo cual otorgo a Grupo Roble una ventaja para interesarse en el terreno. 


“Para mi existe una gran interrogante, de cómo surgió ese impase de ordenanza. Para la primer ordenanza hubo un estudio científico realizado por Geólogos del Mundo y entonces nosotros queremos saber bajo qué nuevo estudio, la alcaldía decidió quitar tal ordenanza” Menciono Sánchez.

                                         Foto: Ulises Iraheta
                         El lugar posee nacimientos de agua que estan siendo contaminados

A pesar de ser un municipio catalogado como una de reservas ecológicas, declarado incluso “Pulmón ecológico” por la Asamblea Legislativa,  es evidente ver la ausencia o acción por parte de las autoridades correspondientes. Organizaciones como UNES (Unidad Ecológica Salvadoreña) y movimientos como Activistas El Salvador, han estado denunciando que la zona es un manto acuífero y pulmón de San Salvador; y cuya deforestación solo traerá daño a la región. Pero a pesar de ello el Ministerio de Medio Ambiente y la Alcaldía de Santo Tomas se excusan diciendo que se cuentan con todos los permisos y que no hay nada que hacer; a pesar que el único permiso ambiental es del año 2009(a través de un estudio que no volvió hacerse recientemente) y cuya clausula disponía de un año para el inicio del proyecto, el cual no se cumplió y por tanto se ha construido en ilegalidad.


Los estragos ambientales son evidentes desde ya y alrededor de 54 familias de las comunidades, que obtenían el agua a través de pozos. han visto como estos se secan y se ven obligados a construir otros. “En la Terracería que ellos han hecho han encontrado una vena de agua, que ellos la han tapado” manifestó uno de los afectados.


A esto se suma la construcción de dos contenedores de tratamiento de agua residuales, las cuales estarán a un lado de las comunidades y contaminaran a otro rio.


                                                   Foto: Ulises Iraheta
Ismael Gomez, uno de los habitantes de las couminidades, se vio obligado a construir un nuevo pozo, luego que el que tuviera se secara por la deforestacion.



En su calidad de Alcalde Efraín Cañas, ha manifestado que la empresa cuenta con todos los permisos y que por ende velara para que se dé el cumplimiento de la compensación Social por parte de estas; además de reunirse con algunos habitantes y autoridades como ANDA (Administración nacional de Acueductos y alcantarillados) para la cuestión de agua potable.

 

Por su parte Grupo Roble se ha defendido mencionando que su proyecto contempla desarrollo para la zona; ya que además del centro urbanístico tiene pensado la construcción de un centro comercial el cual traerá más opciones de empleo a los habitantes de Santo Tomas, además de los empleos directos que se generaran al momento de la construcción.

Entre los ofrecimientos de compensación social que ha ofrecido Grupo Roble, se encuentra la construcción de una escuela, la remodelación de una cancha de futbol, la implementación de tuberías para la obtención de agua potable, reparación de calles y el otorgar más de 500 empleos a obreros de la zona.




Ante ello diversas organizaciones que se oponen al desarrollo que menciona Grupo Roble han presentado una diversidad de recursos, entre ellos uno realizado al juzgado de medio ambiente, el cual les favorecio y reconocio el daño a la flora, fauna y clima del lugar debido a la deforestacion y proclamo a las autoridades a tomar acciones al caso.

 


                                       Fotos: Ulises Iraheta
Documentacion presentada por el Juzgado de Medio Ambiente donde respalda el daño ocasionado

 De la misma forma Mujeres por Santo Tomas en conjunto con UNES y Activistas El Salvador, han presentado denuncias a la Fiscalía General de la Republica y la Procuraduría de los Derechos Humanos; las cuales se han hecho presentes en el lugar y han prometido una investigación profunda de lo ocurrido.








 


 






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